SIN RUIDOS AÑADIDOS

                                   
                          "Old Love" ( Viejo Amor ) Eric Clapton. Album : "Journeyman"



Fue el primero de Octubre de 1.982 cuando apareció el primer reproductor de discos compactos en el mercado. El sistema de sonido Compact Disc, compacto o CD para los amiguetes, fue el resultado de la colaboración de dos gigantes de la electrónica de consumo : Sony y Philips.

El primer modelo de reproductor, el CDP-101, puesto a la venta en esa fecha, pesaba cerca de ocho kilos, y costaba el equivalente a 1.700 Euros de hoy. Simultáneamente, se pusieron a la venta cincuenta discos en el nuevo sistema, de diferentes y variados estilos musicales, desde Beethoven hasta Julio Iglesias, pasando por Simon & Garfunkel. Una variedad suficiente como para poder muestrear todo tipo de sonidos para los amigos de la alta fidelidad.

El tamaño del disco, doce centímetros, estaba buscado como para caber en un bolsillo o en un pequeño bolso de señora, aunque circula por ahí una leyenda urbana, que señala a Akio Morita, presidente de Sony, como el responsable de su tamaño y duración. La leyenda dice que ordenó a los técnicos de la compañia, que los discos tuviesen la suficiente capacidad para contener la novena sinfonia de Beethoven, 74 minutos.

Aunque no está verificada esta "leyenda", personalmente la creo. El recientemente desaparecido Akio Morita era un tipo genial. El desarrolló personalmente el concepto del Walkman, el reproductor de casette portátil para poder escuchar música clásica mientras jugaba al golf o paseaba. Y aquél reproductor de casette de bolsillo, conquistó el mundo, y de paso, enriqueció a los fabricantes de baterias.

Por aquella época, yo estaba al tanto del nuevo sistema de sonido basado en un lector-láser, habia leído algunos artículos en revistas de divulgación científica. Por entonces, como amante de la música, un sistema de sonido que suprimiese el  "siseo" de los discos de vinilo, o el ruido de fondo de las cintas magnéticas, era un sueño. Pero mi bolsillo no estaba en condiciones de afrontar semejante dispendio en aquellos momentos.

Fue allá por 1.989 cuando por fin compré un reproductor de compactos para el equipo estéreo domestico. El coste, unos 180 Euros de la época. El primer disco que compré, fué "Journeyman", de Eric Clapton( aún lo conservo, y está sonando mientras redacto esto ). Cuando conecté los auriculares al amplificador, y arranqué el aparato, un sonido de una claridad desconocida acarició mis oídos. Debí escuchar el disco completo unas tres veces por lo menos. Clapton era en aquella época para mí, y aún lo sigue siendo, un dios de la guitarra.

A partir de entonces, empecé a "reconstruir" mi colección de discos de vinilo y cintas de casette al nuevo formato, re-comprando en compacto una buena cantidad de grabaciones. Se habían acabado los problemas con las agujas de los toca-discos, los discos "rayados", los cabezales sucios del reproductor de casette, y toda la parafernalia de problemas con los sistemas de audio.

Durante una temporada, mi esposa con su proverbial tacañeria, me reprochaba las compras ocasionales que hacia de compactos y libros. Hasta que un día, después de unos de sus reproches, alce la vista de lo que estaba leyendo y con expresión seria pronuncié sin quererlo una frase lapidaria : " La musica y la lectura, fueron mis primeros amores. . . .  y seguramente, serán los ultimos". Desde aquél dia no hubo mas reproches al verme desprecintar algún compacto, o colocar un nuevo libro en las estanterías.

Cuando hace ya algunos años, escuché por primera vez algo sobre el sistema MP-3 de audio, solté un tremendo juramento en vóz alta : "Por Diós, no, un nuevo jo. . . sistema de sonido que dejará obsoleto al anterior, ¡¡ menuda pu. . . .".

Yo ya estaba bastante cabreado con los cambios en los sistemas de audio y vídeo. Cuando aparecieron los primeros reproductores de video, aposté por el sistema "Beta". En su momento, ofrecía algo mas de calidad de imagen que su competidor directo, el VHS. Sony no concedió licencias a otros fabricantes para producid reproductores en Beta, y el sistema, languideció y desapareció lentamente. 

No tuve mas remedio que pasarme al sistema VHS, si es que quería poder disfrutar en casa de películas de alquiler.

Al cabo de poco tiempo, apareció el sistema de vídeo DVD, barriendo con todo lo anterior. El viejo aparato VHS, estuvo acumulando polvo en el fondo de un armario, hasta que un día, haciendo limpieza a fondo en casa, me deshice de él, y de toda la colección de películas en cinta magnética. 

El sistema de grabación en Compacto, afortunadamente dispone de buena salud todavía, a pesar de los treinta años transcurridos. Los sistemas de compresión MP de archivos, no pueden competir con el en cuanto a nitidez y calidad del sonido, sencillamente por espacio de contenido en "bits".

Aún sigo comprando grabaciones en compacto, la ultima adquisición ha sido una reedición del album "Cloud Nine" de George Harrison. Ya los sé, a algunos les sonara "antiguo", pero es que uno tiene ya una cierta edad.

Para mi, las descargas en la red, no podrán competir nunca con un compacto. Aparte de la calidad del sonido, está también la información adicional que contienen las carpetas de los discos. En ellos, hay una buena parte de nuestro arte moderno, tanto en diseño gráfico, como en fotografia. Y lo que es importante también para los amantes de la música, las letras de las canciones, quien las compuso, y que músicos intervinieron en la grabación.

En casa ya no caben demasiados libros más, pero hay espacio para algunos discos más todavía, junto a los tres centenares que atesoro.


- ¿ Casettes, "walkman", video Beta ?. ¡¡ Joder "nene", que viejo que eres ya !!.
- Yo también te quiero Timoteo. ¡¡ Largo de aquí !!.