Cuando yo era joven, allá por el neolítico inferior, la expresión "atar moscas por el rabo" se utilizaba para señalar la incongruencia de algo, o que ese algo incongruente era justificado con argumentos muy retorcidos e inverosímiles.
Esta semana he podido constatar que hacerlo sigue siendo una actividad que goza de muy buena salud en nuestro país, al menos en un par de acontecimientos que han sucedido estos dias.
El primero de ellos ha sido la condena a dos años de cárcel y siete de inhabilitación profesional dictada por la Audiencia Nacional contra la "tuitera" Cassandra Vera por hacer chistes en las redes sociales acerca del magnicidio de Luis Carrero Blanco a finales de 1.973 a manos de ETA.
La Audiencia ha dictado su sentencia invocando la leyes que condenan el "enaltecimiento del terrorismo y el escarnio contra sus víctimas ".
La paradoja de todo esto, es que los supuestos asesinos de Carrero Blanco fueron amnistiados por la ley general de amnistía de 1.977. Y digo supuestos porque no está clara, ni lo estará nunca, la autoría real del magnicidio
Y cuarenta años más tarde, alguien es condenado por hacer chistes facilones y de mal gusto sobre aquél atentado.
El asunto da que pensar :
Primero, la poca carga de trabajo que debe de tener la Audiencia Nacional y la fiscalía como para perder el tiempo juzgando banalidades como esta.
Segundo, la fragilidad de la libertad de expresión que sufrimos estos últimos tiempos en España, a cuenta de este tipo de argumentaciones en actuaciones judiciales, y a consecuencia de la infausta "ley-mordaza" que promovió el gobierno del Partido Popular para tapar sus vergüenzas y sus miserias judiciales, para que a un político corrupto no se le pudiese acusar públicamente de ladrón hasta que no hubiese una sentencia condenatoria firme contra él.
Que puede tardar años en llegar
A Tip y Coll los mandarían actualmente a la cárcel por el chiste que publicaron sobre el último ascenso de Carrero Blanco, el mas rápido de toda su carrera militar.
Hasta Lucía Carrero, nieta del almirante ha lamentado públicamente esta condena que usa la coartada de su abuelo para limitar claramente la libertad de expresión.
Particularmente encuentro de mal gusto los chistes de la señorita Cassandra, pero NUNCA hay que confundir el mal gusto con un delito punible.
Y habría que recordarles al fiscal y el juez responsables de este caso, tan amantes ellos del orden y de la ley, lo que dijo una Padre de la Iglesia, San Agustín de Hipona, quien no era nada sospechoso de ser un liberal anarcoide :
" Nihi Lex Esse Non Videtur, Quae Justa Non Fuerit "
( No me parece que sea ley aquella que no sea justa )
En todo esto creo que se oculta la intolerancia de los sectores de la derecha de nuestro país a cualquier tipo de crítica, y un intento de meter en cintura a las redes sociales, tan activas en la denuncia de sus actitudes retrógradas
El segundo de ellos ha sido la reacción de los propietarios de un restaurante vegano de Tarragona, "El Vergel " ante una madre que en el interior de su local intentó darle un biberón a base de leche de vaca a su bebé, prohibiendole hacerlo.
Los del restaurante alegan que en el exterior de su local, hay un cartel que advierte de las normas de la casa, y en el que advierten que no está permitida la introducción de ninguna clase de alimento de procedencia animál, y eso incluye la leche de vaca.
Puedo entender que los seguidores de la filosofía vegana quieran alejarse todo lo que puedan de los alimentos de origen animál, pero creo que prohibir un inocente biberón para el almuerzo de un bebé es llevar las cosas a extremos delirantes.
Y en la alimentación infantil entramos en un terreno peligroso si queremos aplicar el veganismo extremo. El ser humano en sus primeros veinte años de vida precisa una cantidad tremenda de proteínas animales, que son muy difíciles de substituir con las de origen vegetal.
Las carnes, el pescado, la leche y sus derivados son imprescindibles en el crecimiento equilibrado en los niños y los jóvenes. Y eliminarlos de su alimentación es correr el riesgo de que padezcan serias carencias nutricionales que les acompañaran toda su vida.
Cuando una filosofía se transforma en una religión, con dogmas incluidos, se puede llegar al ridículo mas patético, como es este caso.
Al enterarme de este asunto, creí que la popularidad de este establecimiento se resentiría entre la clientela, pero al echar un vistazo a las páginas del restaurante, vi bastantes comentarios entusiastas de seguidores de la doctrina vegetariana, alabando la coherencia ideológica de los dueños, aunque parece ser que han cerrado la página de facebook.
Supongo que los "trolls" se han encarnizado colocando comentarios ofensivos en su página, algo que tambien encuentro desmesurado.
Otros que atan moscas por el rabo, y se sienten muy ufanos por hacerlo.
Nuestra sociedad padece una seria carencia de una proteína . La "relativina". Necesitamos urgentemente "relativizar" todo aquello en lo que creemos.
Un chiste malo y fácil sobre la muerte de Carrero Blanco no es ningún crimen, ni desde luego es hacer "apología del terrorismo". Hasta las victimas del terrorismo se deberían escandalizar por esta sentencia, porque de rebote, banaliza su dolor y su sufrimiento.
Ni un biberón de leche de vaca deberia ser tóxico ni ofensivo para nadie.
Se tendría que vender en las farmacias, dos píldoras de "relativina" al dia, y viviriamos mas felices y relajados, dándole importancia solo a lo que realmente lo tiene.
Y como podemos comprobar en le dibujo que he publicado, las moscas carecen de rabo.