TORDESILLAS

Tordesillas ( relato ).

No sabia demasiado bien cuanto tiempo llevaba encerrado en aquél corral. Lo habían sacado por la fuerza de sus tierras y metido en un camión maloliente que había hecho un recorrido que a el le había parecido eterno. El nerviosismo se había instalado en su cuerpo y ya no lo había abandonado, transformándose con las horas en un estress casi insoportable.

Su respiración agitada, se aceleraba más aún con cualquier sonido desconocido, y se movía con inquietud en el pequeño espacio del corral. Ni siquiera había hecho caso de la comida que sus captores habían dejado en el suelo del cubículo. No se sentía con confianza y humor para comer.

Desde el exterior le llegaban voces humanas excitadas, cada vez mas fuertes e insistentes. Tanto griterío le enervaba aún mas, nunca había escuchado algo así, y aquél rifirrafe no le barruntaba nada bueno para el.

De repente vio a unos hombres mas allá del cercado, que empuñaban unas largas varas. Sin previo aviso, las puertas del corral se abrieron, al tiempo que una de aquellas varas se clavaba en su espalda, indicándole el camino  hacia las puertas abiertas.

Salió hacia la calle, y se encontró con un grupo de hombres que le gesticulaban y gritaban. Arranco a correr hacia ellos, en una carrera enloquecida, mientras aquellos tipos se zafaban escondiéndose de él, otros los relevaban en las carreras y el griterío. 

Descendió calle abajo, persiguiendo a aquellos energúmenos, mientras su fino olfato le decía que en la dirección hacia la que corría, había campos parecidos a aquél donde había vivido hasta entonces plácidamente. El olor a hierba y arbolado, hizo que acelerase su carrera al cruzar el puente sobre el río, rodeado siempre a cierta distancia por todos aquellos hombres que gritaban y gesticulaban, que reculaban corriendo cuando el se les acercaba.

No supo muy bien como había alcanzado aquél bosquecillo donde buscaba refugio, creyendo que allí encontraría seguridad y sosiego, para calmar el rápido latido de su corazón y recuperar el resuello. Pero el bosquecillo estaba lleno de gente a caballo, y allí no existía la quietud que estaba buscando.

De repente sintió un profundo pinchazo en una de su piernas, y se revolvió con brío y fuerza contra aquello que le estaba hiriendo. Se encontró con un jinete armado con una lanza que retrocedía después de haberle herido, esquivando su embestida. No entendía nada de lo que sucedía. había nacido y crecido rodeado de pastores a caballo, que siempre le habían tratado bien. Sentía correr la sangre por su pierna mientras trataba de alcanzar a aquél jinete, cuando volvió a sentir otra herida en la pierna opuesta.

La energía se le escapaba por aquellas heridas junto con su sangre, mientras el acoso de los jinetes se hizo mas intenso aún. Apenas podía trotar ya para escapar o defenderse de las cuchilladas.

Mientras jadeaba tratando de respirar, vio acercarse rápidamente a uno de aquellos jinetes armados. Desistió de embestirle, e intento correr mientras aquella lanza se clavaba entre sus costillas, y aquel dolor insoportable le inmovilizó, mientras notaba el sabor de su sangre invadiendo su garganta. Otro golpe de lanza volvió a clavarse entre sus costillas, alcanzando y partiendo su agotado corazón. Se derrumbo sobre un matorrral, cubierto de sangre y del polvo que levantaban los jinetes.

No vivió para ver como aquél jinete volvía a lanzearle una vez mas  apeado del caballo, y como aquél hombre mojaba su mano en su sangre, tintándose con ella la cara, mientras gritaba a pleno pulmón.

Fin

Mañana martes dia 15 de septiembre, se celebra en Tordesillas un asesinato ritual perpetrado contra un toro, invocando una tradición medieval. es lo que se conoce como el "Toro de la Vega". Me niego a llamarlo "fiesta", porque nunca la crueldad y el sadismo nunca pueden ser una festividad.

Hemos recorrido un largo trecho en este país desde que se lanzaban cabras desde lo alto de los campanarios para conmemorar la fiesta mayor de algúnos pueblos. la conciencia sobre el maltrato a los animales se ha hecho cada vez mas común en nuestra sociedad.

Las protestas contra esta barbarie anual en Tordesillas arrecian cada vez más año tras año, pero no han conseguido su objetivo : erradicar por ley este asesinato, calificado como "Fiesta de Interés Nacional " por el Boletín Oficial del Estado con fecha del 16 de Febrero de 1.980.

Un linchamiento declarado de "Interes Nacional".

Sus defensores alegan la antigüedad del festejo, que aparece citada en documentos fechados en 1.534.

Pues bien, yo les diría que en 1.534 era usual colocarles a las señoras un cinturon de castidad en caso de ausencia de su esposo. 

¿ A que no se atreven a colocarle uno a sus señoras antes de ir a trabajar ?. ¡¡ Porque la patada en los cataplines que les propinaría su santa esposa seria épica !!.

Figuras hasta tan poco sospechosas de ser anti-taurinas como Arturo Perez Reverte, habitual de las corridas, han levantado su voz contra esta carnicería inútil, que una vez al año hace mundialmente conocido al municipio vallisoletano, y no por nada de lo que se puedan sentir orgullosos en Tordesillas.

No hay épica en esta "lucha" desigual, tan solo crueldad, sadismo y barbarie.

- Yo, a estos tipos, los ponía a perseguir al toro a pié, ¡¡ y con una lanza de goma !!. A ver si se atrevía esa chusma a acercarse al toro.

- No seria una mala idea, Timoteo, y además, ¡¡ en pelota picada !!.