"UN DOMINGO CUALQUIERA"

Pido perdón al Maestro Oliver Stone por birlarle el nombre de una de sus obras maestras.Una pelicula que retrata el sórdido mundo del deporte profesionál en Estados Unidos, y que personalmente recomiendo, aunque a veces la sátira se le escapa de las manos. Un mundo que llegará aquí también, a la vista de como anda la liga de futbol profesionál.

Este domingo cuálquiera es uno de los mios, dedicados al reláx y a recuperarme de los estragos de la semana laborál.

Salgo temprano a paseár a los "chicos" y a comprár la prensa dominicál.Regreso a casa con la planificación de un desayuno relajado amenizado por la lectura de los periodicos y resolvér los "sudokus" tranquilamente.Después salír como mi santa a revolvér un mercadillo dominicál de libros y disfrutár de un aperitivo en una soleada terraza.

- ¿ Te acuerdas de que me prometiste hace semanás subír juntos a la ermita de Sant Ramón ?, podriamos hacerlo esta mañana.

El recordatorio de mi santa me cae encima como una bomba, ¡¡ hala !!, a hacer puñetas el reláx dominicál.

La ermita de Sant Ramón está situada en una pequeña elevación que domina el area costera del Baíx Llobregat.Es visible desde todo el llano que vá desde la desembocadura del Llobregat hasta Castelldefels.No es una grán elevación, la colina debe tener unos cuatrocientos metros de altura sobre el llano, y está recorrida por varios senderos que llevan a la cima partiendo desde Sant Boi del Llobregat, Viladecans ó Sant Climént del Llobregat. Echo un vistazo a la tomas por satélite de Google Earth y me decido por un sendero que arranca desde Sant Boi. Arrancamos en el coche mi santa, los "chicos" y yo en direción al lugar indicado.Tengo que aclarar que mis "chicos" son dos perros de raza Carlino, machos, compañeros mios inseparables y muy aficionados al campo y a la naturaleza.

Aparco al inicio del sendero que lleva a la cumbre, unos cuatro kilometros de ascenso algo pronunciado.

Media hora más tarde llegamos a la ermita que corona la colina. Los "chicos" podrian bién haber hecho el recorrido en diéz minutos, mi santa en veinte y yo llego con los pulmones al limite y haciendo el proposito de dejár de fumár un dia de estos y hacér algo más de ejercicio habitualmente.

Me impresiona la vista que se disfruta de toda la comarca, y la lastima es que hay algo de bruma que empaña la visión, aunque de todas formas la panoramica vale la pena. San Ramón Nonato fué un Santo catalán nacido alrededor del 1204.Parece sér que nació trás una cesarea al morír su madre poco antes del parto.Por este motivo es el patrón de las parturientas, las comadronas y los partos difíciles.Echo un vistazo al interiór de la érmita, pequeña y recoleta como es de esperár. En un rincón hay toda una serie de ofrendas y exvotos, Destaca una placa de "L" de conductor nóvel. Debió de sér álguien a quién costó Diós y ayuda aprobar el examen del permiso de conducír, nunca mejór dicho, y decidió rendír la "prueba" de sú triunfo al Santo.Hay también ropa de bebés enfundadas en plástico.En una grán concha marina naturál yace una figura de Jesús-niño sobre una piél de cordero.Me llama la atención una pagina de cuaderno manuscrita junto a la figura.Es una carta a Sán Ramón escrita por una joven madre, a juzgár por la letra en la que implora al Santo por la salúd de su pequeño.La dejo junto a la figura a medio leér, por un extraño sentido del pudór, y a pesár de ser un servidor bastante descreido, entono silenciosamente una oración por la salúd de aquél pequeño y la felicidád de sús jóvenes padres.

Salgo a exteriór y tomo asiento en las escalinatas al lado de mi santa y los "chicos", a tiempo de vér un curioso espectaculo. Una mujér recién llegada, empieza a saltár junto al pretíl que dá hacia Viladecáns volteando un jersey sobre sú cabeza al tiempo que habla a través del móvil.

-¡¡¡¡ Eeeeooo, ¿ me puedes vér mamá ?!!!!.

Me imagino a la buena mujér allá abajo, contemplando a sú hijita a través de unos prismaticos Carl Zeiss de ciento cincuenta aumentos.

¡¡ El móvil y la madre que nos pa....!! . Hemos llegado al extremo de retransmitír una sencilla excursión por teléfono a mamá, para que cuando bajemos del monte nos tenga preparada la comida del mediodia.

Veinte minutos y dós cervezas más tarde, emprendemos el camino cuesta abajo.

Me asaltan varias reflexiones.

-Me dán envidia los "chicos" por su buena forma fisica y sú agilidad, tengo que dejár de fumár y cuidarme algo más.

-Aunque presumimos de ateos, o casi, las nuevas generaciones siguen teniendo fé y pidiendo milagros al Santo.

-Si algún dia decido subír al Everést y lo consigo, allá arriba encontraré algún hortera diciendole a su madre mediante el móvil de marras lo que se divisa desde allí .