viernes, 9 de noviembre de 2012

EL CONCEPTO DE "MATRIMONIO", EL PARTIDO POPULAR, Y EL TRIBUNAL CONSTITUCIONÁL


                                 
                                                " Que digan misa"  Tino casal.




El pasado día siete de Noviembre, el  pleno de Tribunal Constitucional, rechazó el recurso presentado por el Partido Popular a la ley de reforma del Código Civil que instituía el matrimonio civil para las parejas homosexuales. El resultado de la votación de la cúpula de los jueces ( 8 a favor, 3 en contra ) fue bastante contundente. 

Para entender lo que ha sucedido estos días, tenemos que retroceder hasta el año 2.005, cuando el primer gobierno de Jose Luis Rodriguez Zapatero, promovió la reforma  con su mayoría en el Congreso de los Diputados, y abrió la puerta para que millares de parejas homosexuales pudiesen legalizar su situación, casándose y adquiriendo los mismos derechos que las parejas heterosexuales.

La reacción del Partido Popular, por entonces en la oposición, fue inmediata : presentar un recurso a la totalidad de la ley ante el Tribunal Constitucional. Hay que enmarcar esta reacción, en la política de oposición feroz llevada contra el gobierno por los Populares, y no dudaron en aliarse con la Conferencia Episcopal Española, la Iglesia, que por entonces había puesto el grito en el cielo, ( nunca mejor dicho ), al considerarse los "depositarios" del legitimo "matrimonio", que según ellos, solo se puede dar entre dos personas de diferente género, y santificado en los altares.

La Iglesia y los Populares no dudaron en echarse a la calle en manifestación, en defensa del "matrimonio tradicional". Fue el 18 de Junio del 2.005, y obispos y lideres del Partido populár desfilaron por Madrid con la Cruz, la bandera española y una pancarta en la que se podía leer : "Matrimonio = Hombre y Mujer ".

Como de costumbre, el balance de la asistencia a la manifestación fue bastante discutido, debido a las cifras que dieron los diversos observadores :

                                      Según la policía municipal :               166.000 personas.
                                      Según la Comunidad de Madrid :     700.000 personas.
                                      Según los organizadores :              1.500.000 personas.

Después de ver esta disparidad de cifras con la distancia del tiempo, he llegado a entender porqué demonios se han hundido algunos bancos españoles. Los mismos que contabilizaron los asistentes por parte de la organización, debían estar en el consejo de administración de "Bankia" hace siete años.

Aunque uno es heterosexual, me he alegrado personalmente de que el recurso contra la ley haya sido "tumbado" en el Constitucional, y me ha hecho reflexionar aún más sobre la forma ruin y egoísta de hacer política que hay entre nuestros "padres de la patria".

La homosexualidad es algo transversal en nuestra sociedad, y como en todas partes, en el Partido Popular hay militantes y dirigentes que son homosexuales. Fueron los primeros criticar el recurso contra la ley, aunque en voz baja, no fuese que resultasen expulsados del partido por romper la imagen de bloque monolítico que pretendían vender.

Siete años después, y tras el fallo del tribunal, el señor Rajoy, nuestro decidido presidente,  se ha descolgado con unas declaraciones, en las que afirma que ellos, los Populares, solo estaban en contra de que estas bodas fuesen denominadas "matrimonios".

Lo malo de las hemerotecas, y de los que tenemos buena memoria, es que podemos recordarle caminando tras la pancarta, en compañía de los obispos de toda España.

Un servidor, siempre ha creído en las libertades civiles, y en la igualdad de derechos ante la ley, independientemente del color de piel, confesión religiosa y orientación sexual.

Crecí en la España gris del final del franquismo. Los que rondamos los cincuenta, podemos recordar que en aquellos años oscuros, a los homosexuales, solo por el hecho de serlo,  se les podía aplicar una ley represiva denominada "Ley de Peligrosidad Social", y que incluso, llegó a aplicar el Tribunál de Orden Público, una herramienta de represión feroz al servicio de la dictadura.

Por fortuna, desde la transición política española, y hasta su definitiva derogación en 1.995, se dejó de aplicar la citada ley a los homosexuales. Ya no los enviaban  a las carceles por ser como eran.

Crecí con compañeros de estudio homosexuales a mi alrededor. No era fácil serlo en la España de finales de los setenta. La presión familiar era tremenda, el tener un hijo homosexual era considerado por algunas familias, un "castigo divino". La sociedad civil, tampoco lo ponía fácil. Eran discriminados, cunado no objeto de burlas crueles y chistes fáciles.

Los he visto crecer, y empezar a peinar canas. Les he visto reivindicar su sexualidad, ganarse un sitio al sol y hacerse respetar. Les he visto envejecer y formar parejas estables. Les he visto tener sueños como los miso, tener ganas de progresar y hacerse un lugar en el mundo.

Y aunque no comparta su forma de entender el sexo, les respeto, y creo tienen todo el derecho a tener las mismas obligaciones, y los mismos derechos que yo.

Algunas particularidades de la cultura "gay" no acaban de convencerme. Como el hecho de que tengan tendencia a agruparse en algunos barrios de nuestras ciudades, como en la parte sur del Ensanche de Barcelona, o en el barrio de Chueca en Madrid, con toda una estructura de servicios orientados al colectivo. 

No deja de ser una paradoja, el que hayan estado tantos años luchando por la integración, "salir del armario", como dicen ellos, y una vez conquistada la igualdad, se creen ellos mismos sus propios "ghettos", y se instalen allí.

O que me conviertan el "Dia del Orgullo Gay" en un sucedáneo del carnaval de Rio de Janeiro. Pero en fin, sobre gustos, no hay nada escrito, y allá ellos.

Por otra parte, todo este largo asunto, tendria que hacernos reflexionar que en política, el "todo vale" para desgastar a los rivales, es inadmisible, máxime cuando se juega con las LIBERTADES CIVILES, algo por lo que tanta gente ha luchado, sangrado y muerto durante años.

Mariano Rajoy tendria que empezar a tomar nota de la derrota electoral de Romney en Estados Unidos, y empezar a hacer "limpieza" del particular "Tea Party" que tiene en el interior de su partido. Quiero decir que con los "ultra-catolicos" y los "fachas", tan solo tiene un lastre que le impedirá llegar a ninguna parte.

Y los del Tribunal Constitucional, que también "se hagan mirar lo suyo". Porque siete años de tiempo, para dictar una sentencia que tan solo tiene una reflexión de veinte minutos, ¡¡ es algo muy grave !!.

Articulo 14 de la Constitución Española : 

" Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social".

Creo que desde 1.978, quedaba muy claro.

                                    "... cambia la aguja del dial,
                                         y no te pares a pensar,
                                        lo que han dicho de ti.
                                        Abre los ojos, y tal vez,
                                        entre la espada y la pared,
                                        haya un sitio para tí........"
                                   










11 comentarios:

  1. Pues... basicamente coincidimos. Independientemente de ser hetero... me he alegrado de que se mantenga la ley del matrimonio. Hay tantas parejas como personas y hay niños de por medio. en definitiva, hay decisiones que, una vez tomadas, no se pueden echar atrás
    Besos

    ResponderEliminar
  2. Y sobre todo, porque tiene todo el derecho a vivir en paz como cualquier otro.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. Ay, Rodericus, a mí se me cae el corazón al suelo: siete años para decidir algo que cualquier persona con dos dedos de frente no dudaría en contestar, cuánta razón. ¡Pues claro que había que mantenerlos! ¿Es que cabía otra posibilidad en una sociedad democrática?

    Luego estos son los mismo que después van por ahí haciéndose las víctimas y diciendo que no se les respeta sus creencias. Pues no, lo siento, si no respetan ellos los Derechos Humanos, no hay nada que respetar.

    De Romney mejor ni hablamos, que ya habló él y se cubrió de "gloria". :S

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Olvido, los del Constitucional, si llegan a estar en una empresa privada, y les controlan la productividad, no pasarían los quince días de prueba.

      El problema de la derecha española, es que lo único que ha modernizado son los trajes que llevan. Por lo demás, siguen viviendo mentalmente en la época de Franco, y doblando la espalda delante de los obispos y cardenales. Y así, ni ellos ni nosotros vamos a llegar a ninguna parte. No se porqué demonios viajan por toda Europa, si no se les "pega" nada de sus colegas del otro lado de los Pirineos.

      Bueno, no se si has visto el mapa electoral del voto en USA. Romney tan solo ganó en los estados del centro del país, lo que llaman el "cinturón de la Biblia". De la que nos hemos libardo, ¡¡ ufff !!.

      Un beso.

      Eliminar
  4. España es un país católico. El matrimonio legítimo solo puede darse entre dos personas de diferente género, o sea: un hombre y una mujer. Los que tienen otra "orientación sexual", se puede llevar "su orgullo" a Alemania...

    P.D.: ¿Le compraste un saco de Dog Chow de carne y pollo a Atila?, o lo vas a dejar morirse de hambre.
    No seas rata, recuerda que es tu mejor amigo...

    un beso legítimo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lucrecia, tendríamos que ir pensando seriamente en suspender el concordato con la Santa Sede.

      Aquí, somos católicos "de boquilla". No veo yo demasiada animación en la puerta de las iglesias el domingo. Y en el entorno de la gente que conozco, no hay nadie que ponga un pié en una iglesia aparte de las consabidas comuniones, bodas y funerales.

      Alguno hay que se acerca por la parroquia, pero es para sacarles algo a los de "caritas", que la vida se ha complicado bastante en estos últimos meses

      La marcha del "orgullo gay" me parece una "horterada" de marca mayor y con "pluma". Pero no se puede generalizar, la mayoría de los "gays" son bastante discretos, y serios.

      Trudy y Atial comen mejor que un servidor, aparte de su pienso "Affinity", se zampan unos platos de pollo con arroz tremendos. Y aparte, sus chucherías y sus galletas.

      Un beso agnostico.

      Eliminar
  5. Mira Rode, a mi los gays-lesbianas-transexuales me merecen todo el respeto. Creo que tienen derecho a enlazarse y a convivir cono pareja con los mismos derechos que un matrimonio hetero. Ahora bien, a esa unión llamarla matrimonio me parece una pena. Para mi es evidente que el matrimonio es la unión de un hombre con una mujer por más vueltas que se le quiera dar. Es, salvando todas las distancias, decir que un negro es como un blanco. Salta a la vista que no. Un negro es negro y nunca será blanco y alrevés. Ahora bién otra cosa es decir que no tengamos que tener los mismos derechos por el color de la piel. Eso no.
    Hale, pues eso. ¡Ea!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Carlos, el nombre que le demos al compromiso de fidelidad y amor de dos personas, es lo de menos. Que lo han llamado "matrimonio" en vez de "unión civil", quizás también es discutible.

      Pero que con la excusa del nombre, el PP lo que pretendía era cargarse la ley. Que hay que mirar siempre lo que hay detrás de cada gesto, y la intención de fondo.

      Lo que importa, es que tengan los mismos derechos y las mismas obligaciones que todos, que para eso pagan impuestos como todos.

      ¿ Ya sabes la "pasta" que no ahorramos sacandoles de la esquizofrenia ?. Porque los gastos de psicologo y los ansioliticos, iban a cuenta de la seguridad sociál.

      Un abrazo amigo mio, te echaba de menos por aquí.

      Eliminar
  6. Prefiero quedarme con el enorme suspiro de alivio que hemos sentido en casi cada esquina del país, con más o mejores argumentos, los homosexuales han conquistado un derecho, el de ser libres de amar.
    Que las Iglesias y otros mosntruos sigan clamando; no me hablan a mí.

    Un beso

    ResponderEliminar
  7. Pues si, un alivio.

    Los de la Iglesia, que digan misa que es lo suyo, y que la escuche quién comulgue con ellos.

    Un besazo.

    ResponderEliminar
  8. Muchos sacerdotes solteros son gays y sin ningún tipo de consideración fueron en contra de los matrimonio gays .Estos mismos de la casta , se metieron a sacerdotes castrenses para ocultar su declinación sexual . Se manifestaron en Madrid , cerquita de sus residencias oficiales y seminarios a todo lujo, pagadas por el pueblo español. Muchos de los populares son gays incluido su jefe de filas. En el cuerpo militar, hay gays a punta pala. Esas manifestaciones de Obispos , sacerdotes castrenses , si o si, eran ganas de fastidiar al partido contrario. Aunque bien mirado ,los políticos son mismos perros con distinto collar . Me alegro mucho las parejas puedan demostrarse su amor entre ellas. Han gastado unos esfuerzos inútiles en querer anular los derechos amarse .Si ese tiempo lo hubieran invertido en dar caza a los ladrones de los bancos , políticos, especuladores y demás saqueadores de las arcas del Estado, otro gallo nos hubiera cantado con el tema "Crisis de la estafa"

    ResponderEliminar

Si has leído mis desvaríos y tienes algo que aportar, hazlo aquí.