Günter Wallraff, ( nacido el 1 de Octubre de 1.942 en Burscheid, Alemania ) es el claro ejemplo de un periodismo combativo, a la véz que muy necesario en nuestra sociedád actuál, donde un liberalismo mal entendido amenaza con minimizár los derechos y las libertades individuales, en beneficio de esa entelequia que se ha dado en llamár últimamente " el libre mercado " y que no es otra cosa que el capitalismo tradicionál llevado a sú extremo más salvaje y depredadór.
Wallraff llegó al periodismo de una forma relativamente casuál. En 1.963 debia incorporarse al servicio militár obligatorio en el ejército de la República Federál Alemána. Tan solo dós meses antes de sú fecha de incorporación, decidió declarase objetór de conciencia, lo que le acarreó serios próblemas, acabando ingresado en un hospitál psiquiátrico militár. El informe médico destacaba que poseia una personalidád anormál y que constituia un peligroso foco ideológico que podia extenderse. Llevó un diario con sús experiencias durante durante sú paso por el ejército y sú internamiento en el psiquiátrico, y Heinrich Böll, uno de los escritores mas críticos con la Alemania de la post-guerra, le animó a publicarlo, convirtiendose en un éxito de ventas.
Estos hechos encauzaron el futúro profesionál de Wallraff hacia el periodismo de investigación. Decidió levantár las alfombras del bienestár alemán, sacando a la supercifie la miseria acumuláda trás el aparente progreso alemán de post-guerra.
Entre 1.963 y 1.965 trabajó en varias empresas metalúrgicas alemanas. Sús reportajes sobre las penosas condiciones de trabajo se publicaron en el periódico sindicál Metall, levantando revuélo y sensación. Después los publicaria recópilados en un libro : Te necesitamos a tí.
Sú nombre fué incluido en una lista negra en los departamentos de contratación de las grandes empresas, lo que no impido que continuase infiltrandose en sús plantillas bajo nombre falso y realizando las crónicas sobre la inseguridád laboral, y las secuelas en la salúd de los trabajadores.
En 1.974, durante un viaje a la Grécia de la dictadura de los coroneles, fué detenido durante en transcurso de una protesta, siendo encarcelado y torturado, hasta que sus carceleros descubrieron su condición de extranjero y súbdito alemán. Fué condenado a catorce meses de prisión por actividades subversivas, y posteriormente puesto en libertád a la caída de la dictadura militar griega.
Tampoco es un periodista corporativista. En 1.977 se infiltró en la redacción de periódico sensacionalista Bild, denuciando en varios artículos los metodos poco escrupulosos de redacción e investigación de este diario, el primero en tirada de ejemplares en Alemania. El Consejo de Prensa Alemán emitió seis advertencias a la empresa editora de Bild por sú escasa ética en el tratamiento de la información, pero también otra para Wallraff pór falseár sú identidád para conseguír información interna sobre este diario.
La empresa editora del diário pleiteó ante los tribunales para impedír la publicación del trabajo de Günter sobre sú periódico, consiguiendo tan solo la revisión de ciertos parrafos sobre las conversaciones de los redactores de Bild, que se publicaron ostensiblemente tachados en negro en las siguiéntes ediciónes.
Su trabajo más conocido publicado en castellano es : "Cabeza de Turco". En él se narran las experiencias de Wallraff durante un pár de años, durante los cuales se hizo pasár por un inmigrante ilegál túrco, Alí, empleado en la economia sumergida alemana. Las penosas condiciones laboráles le pasaron factúra : " ... problemas musculares, de huesos y bronquiáles, apenas podia caminár más de quince minútos, nos obligaban a trabajár sin máscaras en una fábrica metalúrgica de acero, la de Thyssen ".
El reláto de estos dos años se convirtió en un best-seller. Y afortunadamente trajo consecuencias positivas positivas. El grupo Thyssen y otras empresas fueron obligados a contratár técnicos en seguridád laborál, y las jornadas de dieciseís horas consecutivas fueron prohíbidas.
Con lo beneficios del bombazo editoriál, creó una fundación que defiende los derechos de los trabajadores afectádos por despidos improcedentes o condiciones de trabájo penosas.
Enrojece y avergüenza conocér reálmente el orígen de la fortuna que hay detrás de los Thyssen-Bornesmyza que corren por nuestro país, ejérciendo el mecenazgo en el árte y la cultúra, y apareciendo con frecuencia en la prensa rosa. Sencillamente, la sangre de otros.
Sú ultimo trabajo : " Con los perdedores del mejór de los mundos", explora el submundo de la mendicidád y de los "sin techo". En él relata que al inicio de sú trabajo, se caracterizaba vistiendo de una forma extravagante. Pero tratando a los marginados descubrió que eran en sú mayoria gentes normáles, que procuraban cuidár sú aspecto, y que quizás en tiempos pasados no harian acabado viviendo en la calle.
Su conclusíón fué demoledora : cualquiera puede acabár en la indigencia y sobreviviendo en las calles.
No sé si los periodistas como Wallraff son una especie en extinción, pero creo que el periodismo actuál se aleja de los caminos del periodismo sério de investigación clásico. El poco periodismo de este género que se practíca en España, está mas orientado a la morbosidád barata y al sensacionalismo más apestoso.
Hoy mas que nunca, son necesarios periodistas de este fuste, y con la profesionalidad escrupulosa de Günter Wallraff. Durante sús años de trabajo, ha acumulado cientos de denuncias en los tribunales. No ha sido condenado en nigúna ocasión. Posiblemente las haya encuadernado en tomos y guardado el la libreria de sú casa.
Portada de Cabeza de Turco
Obra disponible de Günter Wallraff en castellano :
- " Un periodista indeseable "
- " Cabeza de Turco"
- " Con los perdedores del mejór de los mundos "
Las trés están disponibles en el catalogo de la editoriál Anagrama
Después de ver cómo se llenan los bolsillos los individuos de cierto programa de Tele 5 y sin ser periodistas, una de dos, o los periodistas de verdad tiran su título universitario al WC o que se pongan las pilas y aprendan del Sr. Wallraff.
ResponderEliminarSaludos Rodéricus.
Pd: Me he reído mucho con tu comentario sobre el Sr. del Bigote en el blog de nuestro amigo el Bwana.
Ha sido el periodista mas conflictivo de la Historia Moderna de Alemania.
ResponderEliminarHizo literatura obrera.
Siempre insistió en la moralidad de su procedimiento de trabajo.
Pero se hizo el "loco" para no hacer el servicio militar alemán.
Esta clase de periodistas son una "especie en extinción"
besos
Carlos, el periodismo de nuestra época es un fiél reflejo de nuestra sociedád. Vivimos en una sociedád decadente, que tiene pendiente una regeneración a fondo si quiere sobrevivír. Tengo mis serias dudas si dós periodistas como Woodward y Bernstein ( caso Watergate ) encontrarian trabájo con su "curriculum" en las redacciones de hoy, el podér ya es intocable, ó casi. El modelo tele 5 acabará convertido en un circo ambulante al paso que vamos. Pero creo que siempre quedará un rincón para el periodismo inteligente, que volverá a crecér cuando pase el diluvio.
ResponderEliminarUn salúdo Cárlos
Lucrecia, eso es un pecádo de juventúd. Tendrias que habér visto las variopintas excusas que se planteaban cuando yo hice el servicio militár. Algunas hasta "colaban", aún recuerdo como se fingian las gastroenteritis crónicas. Al menos Wallraff fué valiente.
Aquí ha aparecido álguien parecido, pero no ha llegado a sú grado de profundidád y atrevimiento.
Necesitamos como mínimo 17 Wallraffs, uno por cada reino de Táifas que son las autonomias.
Salúdos guapetona.
¡Te extraño, Josép! ¿Cómo estás?
ResponderEliminarSiente un abrazo inmenso lleno de cariño :D