domingo, 8 de mayo de 2016

LOS MESES DE LA BASURA



En el argot del baloncesto existe lo que se llama los "minutos de la basura". Son los minutos finales del ultimo cuarto, cuando uno de los dos equipos ha acumulado una diferencia abultada a su favor en el marcador, y el otro equipo está imposibilitado ni siquiera para rebajar la diferencia que le separa del vencedor.

Son minutos que no aportan nada al juego que inexorablemente termina, un puro trámite donde ya no hay un espectáculo estimulante para los espectadores. Como se dice vulgarmente, en esos momentos ya "está todo el pescado vendido".

Y los espectadores abandonan sus asientos en dirección a las salidas antes de que suene la bocina que marca el final del juego

Políticamente, y sin saberlo, desde diciembre del año pasado hasta el próximo mes de Junio, estamos viviendo en este país los "meses de la basura".

No ha habido un acuerdo para formar una mayoría estable en el Congreso tras el resultado electoral  del veinte de Diciembre pasado. Nuestro sistema parlamentario, diseñado y retocado en todos sus detalles ( Ley D´Hont ) para funcionar como un sistema bi-partidista, ha demostrado sus limitaciones.

El Partido Popular, la lista mas votada ( aunque sus comunicadores se consideran a si mismos  los "ganadores" de las elecciones, lo cual no es cierto ) ha sido incapaz de encontrar un "socio" para gobernar en coalición, a pesar de las afinidades que tiene con Ciudadanos.

La inoperáncia, la parálisis y el enrocamiento de Rajoy en su despacho durante cuatro años, el seguir linea por linea las recetas económicas de Angela Merkel y la Comisión Europe,  sus falsas ruedas de prensa a través de un monitor de plasma le han pasado factura, y una parte de su electorado se ha pasado a votar a Ciudadanos, esperando una forma de gobernar mas decidida, y sobre todo, sin lastrar por el robo y el latrocinio continuado y organizado que han cometido una parte de los populares, con la protección y el silencio de la otra parte.

El Partido Socialista anda desnortado, tratando de recuperar sus esencias perdidas en sus años en el poder, cuando pasó de ser un partido socialdemócrata de base obrera, a ser un partido para las nuevas élites y los nuevos ricos del país, la "gauche divine" de la época que hacia cola para participar de la intimidad de Felipe González en la "Bodeguilla" del palacio de La Moncloa.

La falta de identidad, de fondo ideológico y también las cuchilladas por la espalda que se propinan sus barones y baronesas en el ansia por acceder a la secretaria general del partido, han provocado la abstención de una parte de su electorado natural, la clase proletaria, que ha buscado otros valedores en los partidos de la nueva izquierda.

Ciudadanos, la nueva formación de centro derecha ( aunque ellos insisten en que son centristas ), no ha conseguido "matar al padre ideológico" , el Partido Popular, a pesar de las expectativas creadas por las encuestas del año pasado, y su embrión de pacto con los socialistas no ha llegado a ninguna parte.  

Lo viejo no acaba de morir, y lo nuevo no acaba de nacer.

A Podemos y su constelación de partidos de la nueva izquierda, les ha podido la impaciencia por "tocar poder" y se les ha visto el latón de novatos en política activa. Han malogrado un posible acuerdo de gobierno en coalición por su afán de protagonismo en un hipotético gobierno a tres bandas, reclamando ministerios, secretarias y el control obsesivo de la seguridad del estado.

Alguien tendría que decirle a Pablo Iglesias que deje de leer a Lenin, que está muerto y momificado en el Kremlin. Que este país no es la Rusia zarista, ni estamos en 1.917. Y que las soluciones a los problemas de una crisis económica compleja pasan por ser acordadas de una manera progresista, si, pero ante todo, realistas.

En resumen, casi siete meses de "circo político", donde los partidos han dado muestra de sus incapacidades, de sus flaquezas y sus carencias, de sus ambiciones inconfesables, y sobre todo, de su desapego de la realidad que viven los ciudadanos del país.

Y a no ser que cambien radicalmente las cosas, las encuestas dan un resultado electoral muy parecido para las elecciones de Junio.

Otro empate técnico.

- Yo tengo la solución, "Nene". No tardarían mas de una semana en investir a alguien prsesidente.

- ¿ Como lo harías Timoteo ?.

- Dejarles sin sueldo hasta que no se haya constituido un nuevo gobierno.

- Yo tengo un método mejor Timoteo, el método "Viterbo" .

- ¿ Cual es ese ?.

- A la muerte del Papa Clemente IV en el año 1.268 se reunió en el palacio episcopal de Viterbo el cónclave de cardenales que debían elegir sucesor. Los votos estaban muy divididos y enconados entre dos candidatos, y la reunión de purpurados se prolongó durante casi tres años. Como el municipio de Viterbo debía hacerse cargo de la manutención de los reunidos, y aquellos tipos comían y bebian realmente como cardenales, el consejo de la ciudad decidió encerrarlos a pan y agua, para ver si se decidían de una puñetera vez, y una vez elegido el papa, volvían a sus predios, dejando en paz las exhaustas arcas municipales.

-  ¿ Y lo consiguieron haciéndoles pasar hambre ?.

- Pues no, los del consejo hubieron de desmontar el techo de la capilla donde se efectuaban las votaciones, dejandoles al raso,  a la intemperie.  Solo después de tres muertes de cardenales por hipotermia llegaron a un acuerdo.

- Je, je. No estaría nada mal hacer algo así con esta pandilla de poltroneros. 






5 comentarios:

  1. Eso se llama Cónclave.
    Viene del latín "bajo llave". Con (con) clave (llave).
    y si tienes razón. Bajo llave hasta que lo arreglen
    Salut

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    1. Si Miquel, ¡¡ bajo llave y con el restaurante cerrado !!.

      Que estos jetas son capaces de pedir ibéricos y caviar de menú.

      Un abrazo.

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  2. Tienes razón esto parece un circo y estamos hastiados de los políticos que no sabe llegar a acuerdos y ha sido un fracaso político .

    Yo creo que ahora el resultado será peor porque será parecido pero aún más complicado para pactar.

    Veremos a ver en qué acaba todo esto si habrá que volver a unas terceras elecciones.

    Un besazo.

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    1. Soy algo pesimista, Maria. No solo es que los partidos políticos son de una baja calidad democrática, es que el sistema también se ha quedado pequeño y se ha colapsado.

      En fin, en Bélgica estuvieron dos años y medio sin gobierno, y no fue el apocalipsis.

      Un besazo.

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  3. Los ciudadanos ya elegimos en su día. La pelota está en su tejado, no en el nuestro.
    Un saludo.

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