EL RETORNO DE LA INQUISICIÓN

La madrugada del 6 de Abril del pasado 2.009, un terremoto de 6,3 grados de potencia sacudió la región italiana de los Abruzzos, y redujo a ruinas a su capital, L´Aquila, una pequeña ciudad con aproximadamente unos 70.000 habitantes en el momento del seísmo. 

El balance del desastre, fue de algo más de trescientos muertos, mil quinientos heridos de diversa consideración, y sesenta y cinco mil evacuados por el mal estado de las construcciones de la ciudad. Casi toda su población.

La destrucción se ha llevado por delante casi todo el patrimonio arquitectónico de L´Aquila, incluidas varias joyas del arte del Renacimiento, y su centro histórico de origen medieval

La noticia esta pasada semana, es que un juez italiano ha condenado a los siete integrantes de la Comisión Nacional de Grandes Riesgos, entre cuyas competencias está la prevención de seísmos, a seis años de prisión por no haber advertido a la población de la inminencia del trágico y potente terremoto.

La comunidad científica internacional ha puesto el grito en el cielo, y creo que con toda la razón.

Con los medios técnicos de que disponemos a estas alturas del siglo XXI, es imposible determinar a "priori" la cercanía de un terremoto.

Aunque existen varios métodos que pueden alertar de un posible terremoto, ni los expertos mas técnicos en el campo de la sismologia se ponen de acuerdo en su validez. El metodo considerado mas fiable en la actualidad, que consiste en la medición de las emisiones de gas radón por el subsuelo, supuestamente mas altas en las zonas donde se va a producir un seísmo, tampoco pone de acuerdo a los expertos en sismologia, porque no es considerado infalible.

Detrás de este juicio, creo que existe una "caza de brujas" para determinar a unos "culpables"  ante la opinión pública italiana. Tras ello, se esconde la mala gestión del desastre por parte de las autoridades. Algo mas de dos años mas tarde de la tragedia, las obras de reconstrucción de la ciudad siguen paralizadas por falta de fondos, y quizás de voluntad política.  

La mayoría de los ciudadanos evacuados siguen viviendo en condiciones precarias sin poder regresar a su ciudad y a sus hogares.

Quizás sea un intento por desviar la atención pública de los verdaderos responsables de la magnitud del desastre. Los Abruzzos, es una región italiana que históricamente ha sido sacudida por los terremotos. Hay registros fiables de su intensidad desde la época romana, y está considerada desde siempre una zona de alto riesgo sísmico.

Tras el desastre, se comprobó la deficiente aplicación de la legislación sobre construcciones en zonas de riesgo sísmico que técnicamente rige en Italia. Hasta el hospital de San Salvatore, edificio construido a partir de 1.997, que teóricamente estaba levantado cumpliendo la normativa, tuvo que ser evacuado por el riesgo de derrumbe que presentaba su estructura tras el terremoto.

 Y tras todo esto, viene la reflexión. Como casi todos sabemos ya, en Italia existen y conviven dos "poderes", el "oficial" representado por el estado, y el "otro",  que vive en la sombra desde hace siglos, y que controla una buena parte de la economía real del país. Tiene varios nombres, Mafia, Na Draghetta, L´Honorata Societá, pero en el fondo todo es lo mismo : el crimen organizado.

Y el negocio de la construcción, siempre ha sido un método eficaz para "blanquear" y legalizar el dineros sucio de estas organizaciones. Es imposible llevar un control estricto de la calidad de las nuevas construcciones. 

Las certificaciones sobre los métodos de construcción y su composición, suelen ser mas falsas que Judas, y solo valen lo que su peso en papel. Solo sirven para dar una apariencia de legalidad a las empresas constructoras.

La justicia, en este caso, ha tapado burdamente las vergüenzas de los auténticos responsables, no del terremoto en sí, que es una fuerza impredecible de la naturaleza. 

Pero si la de los responsable de que la magnitud del desastre haya sido tan grave.

La de los constructores que levantaron edificios, ahorrando mezquinamente el hormigón armado y no respetando las normas legales

La de las autoridades que de una forma interesada  o no, miraron hacia otro lado ante el incumplimiento de la normativa legal en su momento. Y que después del desastre,  no dieron la talla a la hora de ahorrar sufrimientos y mitigar el desamparo de sus ciudadanos.

Tras todo esto, ¿ que científico en su sano juicio va a formar parte de ninguna comisión de asesores en Italia ?.

Es el viejo estilo de los emperadores romanos. Echar a alguien a los leones para contentar al populacho del Coliseo, mientras el estado y la ley se desmoronan.

Cuando la justicia sirve a intereses ajenos a la verdad, y solo sirve a los intereses de los poderosos, tiene otro nombre : Inquisición.



- Oye "nene", ¿ porque no le dedicas algún "post" a la justicia española ?, Que aquí también hay mucha "tela" que cortar.

- Lo se perfectamente, Timoteo. Pero si escribo lo que pienso, acabaría en el "talego", como dices tú. Por falta de respeto a la autoridad, por desacato, y hasta por apología del terrorismo.

- Vale "nene", guardaré la pistola bajo llave a partir de ahora, que tu eres muy bruto y estas muy "quemao".