La decisión del jurado de concederle el Noble de literatura a Bob Dylan me sorprendió bastante, pero si se lo hubiesen concedido a Leonard Cohen no me habría sorprendido en absoluto.
Una paradoja del destino, en los dias en los que la oscuridad parece cerrarse en el horizonte, desaparece uno de los grandes poetas de finales del siglo XX. Es como si Leonard no hubiese querido ver lo que se avecina.
Solo mi vecindario conoce las interminables veces que escucho esta canción.
Me sentenciaron a 20 años de aburrimiento.
Por tratar de cambiar el sistema desde dentro.
Ahora vengo, ahora vengo a cobrarmelo.
Primero tomaremos Manhattan, después tomaremos Berlín.
Me guía una señal en el cielo
Me guía esta marca de nacimiento en mi piel.
Me guia la belleza de las armas
Primero tomaremos Manhattan, después tomaremos Berlín
Realmente quería vivir contigo, nena.
Me encanta tu cuerpo, tu alma, y tus ropas.
¿ Pero ves esa cola de ahí, moviéndose a través de la estación ?
Te lo dije, te lo dije, te dije que yo fuí uno de ellos.
Ah, me amaste cuando era un perdedor.
Pero ahora te preocupa que quizás venza.
Sabes como pararme.
Pero careces de la disciplina necesaria.
Durante cuantas noches recé para esto.
Para que mi obra comenzase.
Primero tomaremos Manhattan, despues tomaremos Berlín.
No me gusta su negocio de modas, señor.
Ni me gustan las drogas que le mantienen delgado.
No me gusta lo que le ocurrió a mi hermana.
Primero tomaremos Manhattan, despues tomaremos Berlín.
Realmente querría vivir contigo, nena. . . .
Te doy las gracias por las cosas que mandaste.
El mono y el violín Plywood
Practiqué cada noche, y ahora estoy listo.
Primero tomaremos Manhattan, despues tomaremos Berlín.
Recuérdame. Solia vivir solo para la música.
Recuérdame, yo te llevaba las bolsas de la compra
Es el Dia del Padre, y todo el mundo está herido.
Primero tomaremos Manhattan, despues tomaremos Berlín.
Un canto a los perdedores que se revuelven contra su oscuro destino, o quizás una profecía.
Descansa en paz, has dejado una obra indeleble. Fuiste la voz de los desencantados, de los olvidados, la voz de los que se negaron a auparse al carro de un falso progreso, de los que renegaron de la falsa moral.
Y a pesar de todo eso, te has convertido en inmortal.
Yo he pensado lo mismo en relación al Nobel.
ResponderEliminarDescanse en paz, todo él era elegancia.
la verdad es que en cuanto a poesía, a literatura, aventajaba de largo a Dylan.
EliminarUn abrazo.
Siempre digo que Cohen era un americano reconvertido en bohemio de París.
ResponderEliminarUn saludo.
Tenia los modos de un "chansonnier" francés.
EliminarUn abrazo.
ja es va dir que mereixia més el Nobel ell que Dylan, a nivell personal mai ha cridat massa la meva atenció, com la minoria majoritaria de la gent, conec dues o tres cançons d'ell i poc més.
ResponderEliminarJo tinc un parell de reculls de poemari. No era pas dolent.
EliminarUna braçada.
Pues sí, Cohen aliviaba los desconsuelos adolescentes, y una se sentía tan próxima a sus poemas canciones que acababa tan triste como él, pero también se aprendía mucho del amor y sus secuelas.
ResponderEliminarAbrazo
En eso tienes razón Amaltea. Se aprendía del amor, y del desamor.
EliminarTiempos aquellos, en los que necesitábamos una guía para un mundo casi desconocido.
Un abrazo.
Seguramente, Cohen se habría merecido más aún que Dylan el Nobel. No hay que olvidar que Cohen tenía una abundante producción literaria, y de hecho ya era un escritor de cierto prestigio cuando se decidió a ponerle música a algunos de sus poemas.
ResponderEliminarUn saludo, Rodericus
Cierto, antes que cantante era ya un poeta consumado.
EliminarUn abrazo.
No conozco la obra de este señor, por lo tanto, solo saludo al personal...
ResponderEliminarGracias por pasarte por aquí.
EliminarUn abrazo.
..then we take Berlin.
ResponderEliminarAún no puedo escribir sobre su pérdida sin que se empañe la mirada, aún me duele la piel bajo las uñas cuando escucho su voz, aún es pronto para mí.
Un abrazo que reconforta, se ha marchado pero nos lo ha dejado todo
Gracias Pilar.
EliminarUn besazo