CARTA ABIERTA A MONSEÑOR CAÑIZARES

          Apreciado monseñor Cañizares, tengo que reconocer que la conferencia que usted ha dado esta semana me ha hecho rejuvenecer unas tres décadas.

Me explico, monseñor. El talante con el que usted ha dado su conferencia en Valencia hace tres días me ha hecho recordar vivamente a sus antecesores que militaron durante el franquismo en ese concepto que se dio en llamar el " nacional-catolicismo ". 

De verdad, al escucharle tuve que pellizcarme para verificar que yo estaba despierto, y que no estaba viviendo una de esas extrañas pesadillas mías. Creía estar otra vez en 1.975, un año nefasto para la gente de su cuerda ideológica, ya que en Noviembre de ese año falleció su referente ideológico, Francisco Franco, militar de profesión, y dictador y carnicero por vocación.

Pero no, estamos en el año de gracia de nuestro señor de dos mil quince, casi cuarenta años después de que desapareciese aquel sangriento individuo que torturó, asesinó o envió al exilio a una buena cantidad de compatriotas.

Se ha despachado usted a gusto contra los inmigrantes sirios, contra la sociedad española y europea, y contra el aborto.

Usted ha puesto en duda los motivos que tienen los refugiaos sirios para escapar de su país y buscar refugio en Europa, usted los ha acusado de ser un " caballo de Troya " del islamismo radical, que se cuelan por la "puerta trasera" con el animo de pervertir y disolver los valores eternos de la Europa cristiana.

Mire monseñor, no creo que sea muy agradable el mero hecho de vivir en un país en plena guerra civil,  entre el fuego cruzado de un ejercito gubernamental que hace unas semanas, dejaba caer bidones explosivos de trescientos kilos sobre las cabezas de sus ciudadanos de manera indiscriminada en su lucha contra los rebeldes. Si tiene un estomago fuerte, échele un vistazo a esta fotografia, es el resultado de estos bombardeos indiscriminados hace ya mas de un año atrás. ¿ Horrible, verdad ?.

Y por otro lado, tenemos el avance de los fanáticos milicianos del Califato, unos "amables" tipos que aplican una versión pervertida de la ley islámica, y que hacen fusilar a personas por el simple hecho de fumar.

¿ No saldría acaso usted también "por piernas" de Siria en estas circunstancias?.

Por otra parte, usted olvida un detalle : una parte de estos refugiados sirios son cristianos, cristianos perseguidor por su fe. 
Siria ha acogido la religión cristiana desde los tiempos en que Saulo de Tarso se hizo cristiano y pasó a llamarse Pablo, el San Pablo que usted venera como católico, y cuyas epístolas usted ha citado centenares de veces. ¿ Va a negarle el asilo también a los cristianos que huyen de la violencia y de la muerte ?.

Estos refugiados son como usted o yo, ni mejores ni peores, y tienen todo el derecho a buscar asilo entre nosotros.

La sociedad europea puede acogerlos perfectamente haciendo un esfuerzo, sin que su cultura y su cohesión social se vean en peligro.

También ha sido sonora su crítica al gobierno actual por no restringir aún más la ley del aborto. Y es algo que me fascina : la defensa a ultranza que hacen ustedes de las vidas de los no concebidos, y lo poco que les importan las malas condiciones de vida que les esperan a algúnos niños al nacer. ¿ No está esto en contradicción con el credo que usted predica ?.

O sea, le preocupan a usted los no-nacidos, pero una vez que han visto la lúz, ¡¡ allá se apañen ellos a su suerte !!. Muy bien, monseñor.

También ha manifestado que no cree que la pobreza esté tan extendida en la sociedad española como reflejan los datos y los medios de comunicación.

¿ Usted no cree en las cifras que publica CARITAS, una organización católica ( aunque no financiada por la Iglesia ) ?. Mire monseñor, yo creo que usted no pasea por las calles desde hace tiempo. Quizás no exista apenas la pobreza explicita de manual, con síntomas visibles de descuido en el atuendo y en la higiene, con harapos y suciedad. Pero existe.

Mientras le escribo estas lineas que ignoro si alguna vez usted leerá, se celebra el dia internacional para la erradicación de la pobreza.  Las cifras en lo que concierne a nuestro país son escalofriantes : el DIECISIETE  POR CIENTO de la población española vive en la indigencia por falta de ingresos que les permitan atender sus necesidades básicas.

No hay hambre en el sentido estricto, pero si hay desnutrición, grave en el caso de los niños y jóvenes.

Monseñor, pasee usted por Valencia, pero no por el centro de la ciudad. Váyase usted a los barrios periféricos, vestido de seglar, sin alzacuellos ni sotana, y verá usted la realidad en su autentica dimensión.

Lo curioso también, ha sido la asistencia a su conferencia de dos personajes de la política bastante siniestros : Francisco Camps, ex-presidente de la Generalitat Valenciana, y Juan Cotino, ex-presidente de las Cortes valencianas. Dos malversadores, corruptos y cínicos, cuyo paso por el poder ha dejado hundida a la Comunidad Valenciana en la ruina económica y moral mas absolutas, y de rebote, al resto del país.

¿ Y con semejante "auditorio" se atreve usted a criticar la moralidad de la sociedad española moderna ?.

Mire monseñor, ha perdido usted una ocasión magnifica de estar callado. Hablando les hace un flaco favor a los miembros de su iglesia, que se esfuerzan diariamente en ayudar al prójimo necesitado, sin discriminar a nadie por su raza, religión o ideas. Gente como usted, son los que anulan el trabajo incansable y anónimo de estos religiosos de base que entienden como propia la caridad cristiana.

Y si es incapaz de mantenerse callado, pida la jubilación de su cargo al Vaticano, y váyase a vivir con su admirado superior, Rouco Varela, a esa humilde morada que ha costado varios cientos de miles de Euros a la que se ha retirado. Allí con el, se sentirá usted en la gloria, compartiendo charlas e ideas.

Se que usted ha pedido disculpas por el revuelo que han levantado sus palabras, pero sospecho que no ha sido una disculpa sincera, se dice que el Papa Francisco le ha llamado a capitulo telefónicamente, y lo ha puesto a usted verde.

Sin nada mas que comunicarle, aprovecho la ocasión para saludarle, y rogar a Dios que le guarde a usted muchos años.



- ¿ Caballo de Troya ?, ¡¡ un burro es lo que es el !!.

- ¡¡ Chisssssst, Timoteo, calla que nos "empapelan" por atentado al honor y a la imagen pública.

- ¿ Y además eso..... ?.