"Jamas seria socio de un club que admita como miembros a gentuza como yo". ( Groucho Marx )
domingo, 24 de junio de 2012
LA NOCHE DE LOS AÑOS
L´estiu dels Anys Sopa de Cabra
Anoche, la luz de las hogueras rompió como cada año las tinieblas en todo el arco Mediterráneo.
Una tradición pagana, las hogueras de la noche del solsticio, que ha sobrevivido a todos los intentos de borrarla por parte del cristianismo, y que al final, la tradición católica "barnizó" como la noche de San Juan, ya que si no pudo acabar con la fiesta, intentó tergiversar su sentido.
Lo de San Juan, supongo que seria por aquello del "bautismo de fuego".
Vano intento, para muchos, es la noche del solsticio de verano. Cuando celebramos la llegada de las cosechas, e intentamos renovarnos con el fuego nuevo de las hogueras, quemando en ellas todo lo inútil y negativo, y vemos salir el sol con la esperanza de haber renovado nuestro espíritu con las cenizas del ya extinto fuego.
Noche de San Lorenzo, soñando un dulce combate.
Calles llenas de gente, con el corazón descalzo.
De la magia al azul, tocando el cielo, mirando
el punto mas alto, convirtiendo la tierra en
un mundo de amantes.
Caen los luceros, heridos se van, negros al espacio,
concederán mi deseo, y vendrás, con la puertas abiertas,
de par en par, y una brisa dormida de Agosto en las manos.
Seremos los dos, labios de fuego encendiendo la ciudad,
viviremos, solo de las promesas que esconde mi cabeza,
seremos los dos, ruedas que levantan el polvo al pasar,
iremos tu y yo, hasta que se acabe el verano de los años.
La corriente nos lleva a donde el sol no sale nunca. Corro,
y no se lo que estamos buscando, el río ya no se mueve.
El amor es un poema que se borra solo, ruedan los anillos,
brincando, perdidos. Las campanas llaman a dos náufragos
mudos, cuando se acaba el mar, y me decías con los ojos
anegados : nunca, nunca.
Y al final de la espera, hay una luz, que se apaga en invierno
y que estalla en el Junio.
Seremos los dos, sombras de fuego encendiendo la ciudad,
viviremos los dos de las promesas que esconde mi cabeza.
Seremos los dos, ruedas que levantan el polvo al pasar,
iremos tu y yo, mientras siga durando el verano de los años.
Seremos los dos, labios de fuego encendiendo la ciudad,
viviremos solos, entre la oscuridad, huyendo del mañana.
Seremos los dos, ruedas que levantan el polvo al pasar.
Iremos, tu y yo, mientras siga durando el verano, cruzando
el verano, cruzando el verano de los años.
Hay poemas que se transforman en canciones, y canciones que se transforman en poemas e himnos. Esta que he traducido al castellano, es una canción de "Sopa de Cabra", un grupo de rock catalán. La versión que se escucha en el "parche" de Goear que he colocado, es un directo con una calidad y riqueza musical excepcionales.
Y para mí, en su letra encierra la esencia de esta noche mágica. Nuestros sueños, nuestros amores, nuestras esperanzas, nuestros fracasos, y nuestra determinación para superarlos.
Espero que la noche mas corta del año, os haya traído alegría y felicidad. Y que la magia del solsticio, os acompañe hasta el próximo.
Que interesante y amena entrada. Iagualmente te deseo que esta noche te haya traido todo lo bueno que mereces.
ResponderEliminarun abraXo!
Gracias.
ResponderEliminarUn beso.
Sabes que me encante leerte, por aqui no he visto quemar las hogueras, pero allí en los pueblos es una tradición, aún se sacan muebles viejos y enseres que no se utilizan estas hogueras están ardiendo hasta bien entrada la madrugada. La noche de aquí no es lo mismo, petardos y más petardos, con todo mi respeto.
ResponderEliminarMuxus
Te entiendo Rosa. Con lo de los petardos, la otra noche mi barrio parecía Afganistan. Con la legislación municipal, se han cargado las hogueras en los barrios. Ahora hay que solicitar un permiso, y echar arena en el punto elegido para evitar fundir el asfalto. Resultado : no se hace ninguna. Cuando eramos críos, nos pasábamos un par de semanas guardando muebles y trastos viejos para quemar en un descampado. Y aquella noche, al ponerse el sol, le prendíamos fuego con toda la ilusión del mundo.
ResponderEliminarEn fin, tiempos modernos.
Un beso.
Aquí las playas se llenan de hogueras como farolillos que ver desde el otro lado de la bahía, iluminando caras sonrientes y deseosas de tener una excusa para festejar algo.
ResponderEliminarAl final es en lo que se han quedado muchas fiestas, en una excusa de excesos. Menos mal que está la otra cara de la moneda también, la de la fiesta celebrada entre familia, amigos.. pocos pero buenos.
Besos
Tienes razón en lo de los excesos. Esta noche se ha convertido en una excusa para que unos cuantos dinamiteros aficionados tomen las calles haciendo la fiesta incomoda para muchos.
ResponderEliminarLa calidez de una buena compañía, una conversación interesante, compartir un poco de cava y una buena coca de frutas o al gusto, eso es lo que vale la pena de la fiesta.
Y ver amanecer con la satisfacción de haber pasado una buena noche.
Besos.
Pues... yo no conozco esto, es que en Zamora somos muy sosos.
ResponderEliminarOjalá el solsticio te conserve la mente tan clara, como mínimo, hasta el próximo año.
Un abrazo. Carmen
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo.
Yo todavía llegué a conocer y guardar, en el filo de la memoria, aquellas verbenas vecinales en las que se engalanaban las calles y donde todo el mundo ponía su granito de arena para poder dar la bienvenida al verano a su manera.
ResponderEliminarEn tiempos de aglomeraciones es distinto, pero siempre habrá quien huya de todo eso y decida comenzar desde cero de nuevo.
Besos.
También conocí aquella época, Olvido. Nos poníamos de acuerdo para sacar las mesas y las sillas a la calle, y compartir la coca y el cava, mientras sonaba algo de música en un tocadiscos, y los mayores bailaban a la luz de los farolillos.
EliminarHabría que recuperar aquel espíritu.
Un beso.
¡A ver cuando pones un bombardero español y menos americanos!!...
ResponderEliminar;-)
Lucrecia, que yo recuerde aqui solo se ha fabricado uno : el CASA 2.111, y para distinguirlo del Heinkel 111 alemán había que mirarlo con mucha atención.
EliminarUn besito