martes, 1 de mayo de 2012

UNA REFLEXIÓN EN EL PRIMERO DE MAYO

                              Nativos Sioux realizando una ceremonia tradicional.




                                                                               
                                        "Disculpe el señor" Joan Manuel Serrat


Esta mañana, he estado visitando las actualizaciones de mis "blogs" favoritos. Entre ellos está Entre Montones de Libros, una pagina dedicada a la literatura, y cuyos artículos y recomendaciones me parecen muy acertados. La entrada de hoy está dedicada a una obra literaria de caracter profundamente anti-belicista : Johnny cogió su fusil, de Dalton Trumbo. No es una obra apta para todos los públicos, describe la dura situación de un veterano de guerra que retorna a casa con el cuerpo mutilado y paralizado, pero con su mente intacta y prisionera en un cuerpo que no le permite comunicarse con nadie, salvo utilizando el código morse.


A mi, esta cita de la obra de Trumbo, me ha traído a la memoria otra novela anti belicista escrita por Joseph Heller : Trampa 22 ( titulo original : Catch 22  ).


Esta obra, en principio una sátira de trazo grueso sobre los ejércitos y la casta militar, que acaba derivando en un sórdido drama, está ambientada en un escuadrón de bombardeo de la USAAF basado en Italia durante la segunda guerra mundial. El argumento gira alrededor del capitán Yossarian, una aviador que paradojicamente, odia volar. Es una novela coral, con decenas de personajes.


Entre ellos destaca el Jefe Blancavena. Un suboficial, un indio sioux mal encarado y con bastante mala leche, temido por todo el escuadrón por su facilidad para repartir puñetazos, "soplamocos" como a el le gusta llamarlos, entre los oficiales que no le caen nada bien, que son casi todos los de la unidad, y en especial, los de la plana mayor.


En una noche de borrachera, con la franqueza que da el alcohol, le relata la triste historia de su vida al protagonista, el capitán Yossarian.


Pertenecía a una extinta tribu asentada desde tiempos inmemoriales en las colinas del estado de Oklahoma. Durante los primeros años del siglo XX, se descubrieron abundantes reservas de petroleo en ese estado, y la tribu del Jefe Blancavena, tiene una tremenda facilidad para asentarse en terrenos ricos en petroleo. Las compañías petrolíferas descubren esta singularidad de la tribu, y empiezan a seguirlos para aprovechar esta rara habilidad. Una vez asentados en un nuevo terreno, los petroleros procedían a echar de allí a la desgraciada tribu a patadas, para acto seguido, comenzar a perforar y explotar los yacimientos del lugár.


Hasta que un día, los petroleros,  que ya tienen bastantes terrenos sondeados, deciden exterminar a la tribu de Blancavena, para evitar que las compañías rivales aprovechen la extraña habilidad de los indios.  El Jefe Blancavena, el ultimo superviviente perseguido, encuentra refugio en una oficina de reclutamiento del ejercito, y decide enrolarse en él. Porque ya no le queda a donde huir, y porque es mas difícil matar impunemente a un militar, que a un simple "piel roja".


Toda una sátira sobre la conquista del Oeste. Pero,la realidad, superó con creces y crueldad a esta fantasía.


¿ Que que tiene que ver este "rollo" que os he soltado con el Primero de Mayo, el día del trabajador ?. Muy sencillo, creo que la clase obrera española, nos empezamos a parecer terriblemente a la desgraciada tribu del Jefe Blancavena.


Una de las pocas ventajas que da el peinar canas, es que a estas alturas un servidor tiene ya una cierta perspectiva de la evolución de la sociedad española desde la transición hasta el día de hoy.


Y particularmente, de la industria de este país, de la que he formado parte como mano de obra desde mi adolescencia. Cuando se hizo la transición a la democracia, la clase obrera española conquisto una cierta dignidad hasta aquél momento desconocida. Y me refiero a la dignidad, porque en materia de derechos laborales, bajo el franquismo, los tenia casi todos excepto el derecho a la huelga y a libertad para negociar los convenios laborales. 


Con la democratización, los sindicatos, emergieron a la luz después de décadas de actividad y existencia clandestinas. Asumieron un papel importante en la vida económica y laboral española, consiguiendo mejoras espectaculares en las condiciones laborales de la masa obrera. Se instauró la semana laboral de cuarenta horas, y los salarios alcanzaron unos niveles dignos, con clausulas de actualización en los convenios adaptados al crecimiento del IPC, que en algunos años de inflación desbocada, pusieron las cosas difíciles. 


Hubo capítulos complicados en esta historia, como por ejemplo la reconversión industrial de las acerias de altos hornos, obsoletas en aquella época, que fue dolorosa en zonas como el País Vasco  , Asturias y Sagunto. La crisis del sector textil en Cataluña también fue un episodio delicado. Pero aún dentro de la grave situación en algunos sectores productivos, el resto de la maquinaria económica y productiva española fué capaz de absorber el desastre económico y la bolsa de parados procedentes de estos sectores, y para mediados de la década de los noventa, disfrutábamos de una cierta prosperidad al calor de nuestra entrada en la Comunidad Económica Europea, y de la inyección de fondos estructurales procedentes de Europa


Una buena parte de nuestra industria fue adquirida por multinacionales europeas y norteamericanas, que encontraron la oportunidad para invertir en sectores rentables con un coste relativamente bajo. Todas estas inversiones, fueron vistas con agrado tanto por parte de los gobiernos de turno, como por parte de los trabajadores. Parecía que las inversiones extranjeras aseguraban nuestro futuro industrial y la actividad de estas empresas. Por entonces, teníamos un ratio de costes laborales muy bajo en relación al coste de la mano de obra en el resto de la Unión Europea. 


Parecía que nos habíamos instalado en el paraíso. La bonanza económica aseguraba la prosperidad, y empezamos a materializar todos nuestros sueños. Los sindicatos perdieron su combatividad inicial, y pasaron a ser meros gestores de convenios colectivos. La clase obrera, empezamos a vestir con ropas de marca, a comprarnos caros coches de importación, y a definirnos a nosotros mismos en las encuestas como clase media. Vacaciones en Nueva York, segunda residencia en la costa, y pocos ahorros en el banco, o mas bien, deudas e hipotecas que parecían fáciles de financiar mientras a final de mes cobrásemos nuestra nómina.


Todo ello con la complicidad de los bancos y el sistema financiero, ya que los intereses habían pasado en pocos años de un veintitantos por ciento, a un siete u ocho en el peor de los casos. Todos salimos beneficiados. 


Apareció el fenómeno de la inmigración. Millones de personas acudieron aquí atraídos por el olor de la cocina y de la prosperidad, buscando también realizar sus sueños. Aquí fue donde los sindicatos de clase de este país perdieron el control de la situación, permitiendo que la clase empresarial aplicase lo que se dio en llamar los "contratos basura" esta mano de obra inmigrada, con la excusa de la "baja cualificación". Salarios por debajo de los convenios, mientras los sindicatos miraban hacia otra parte. ¿ Porqué preocuparse de estos recién llegados, ya se apañaran, no son de los nuestros ?.


Aquellos "contratos basura" se convirtieron en una herramienta eficaz en manos del empresariado. Con la excusa de la rebaja de costes y la "competitividad, estos contratos pasaron a ser la normalidad, sustituyendo con infra-empleo casi toda la fuerza laboral de las empresas de cierto volumen, salvo en puestos que requerían una cierta formación y especialización, los justos e imprescindibles.


Nuestra decadencia continuó con la expansión de la burbuja inmobiliaria. La presión de la especulación, tiraba para arriba de los precios de la vivienda a veces a un ritmo anual del quince por ciento. Los bajos costes del dinero, se veían compensados por la carestía de los precios de las viviendas. La hipoteca media, paso en poco tiempo de quince, a veinte, treinta y cuarenta años. Toda una vida pagando un techo que tener sobre nuestras cabezas.


De golpe y de repente, nuestros sueños se convirtieron en pesadillas. La firma de tratados internacionales de libre comercio con Asia, provocó el cierre o el traslado de una parte de nuestras industrias. No podíamos competir con alguien al otro lado del mundo cuyo salario diario da tan solo para un tazón de arroz y poco más.


Las multinacionales, que años atrás nos veían como un país atractivo para producir la gama barata de sus catálogos de producto, empezaron a practicar algo que eufemisticamente se ha llamado la "deslocalización", que no es otra cosa que cerrar las fábricas y trasladarlas a lugares con coste laborales mucho mas baratos que los nuestros.


Y al final, la burbuja inmobiliaria, acabó estallando. Casi todo el sector constructivo, salvo las grandes empresas especializadas en obra pública, ha quebrado, mandando al desempleo a millones de trabajadores.


Hay millares de viviendas por todo el país a estrenar, que no se venderán nunca. Mas de cuatro millones de parados llenan las listas del desempleo. Familias enteras no tienen ni a uno solo de sus miembros con un empleo asegurado, y muchas están perdiendo sus viviendas y los ahorros de generaciones.


No voy a cargar las culpas de todo esto solamente al sistema empresarial y al sistema financiero. Nosotros mismos, tenemos algo de culpa en todo ello. El ratio de endeudamiento privado en España es de los mas altos de Europa, y ha sido el complemento de la "tormenta perfecta" que ha sido la crisis en España. Vendimos nuestra libertad a cambio de un adosado en la costa y de un coche carisimo que no hemos acabado de pagar.


Es por eso que hoy no he salido a la calle, para desfilar detrás de los colores de algún sindicato que durante años ha estado durmiendo el sueño de los justos, y que ahora, tras el amargo despertar, quieren recuperar el tiempo y el terreno perdido a toda prisa, y cuando ya es demasiado tarde.


Para las clases adineradas de este país, que han "deslocalizado" sus negocios a otros lugares, y han sabido invertir fuera del país los beneficios obtenidos, la clase obrera ya tan solo somos una molestia inútil, un estorbo, un limón ya exprimido. Nuestro pellejo no vale ya un Euro, como la tribu del Jefe Blancavena.


Señores, tenemos mucho trabajo por delante, tenemos que reinventar toda una sociedad, todo un sistema productivo, y si me apuran, todo un país. Hemos retrocedido al nivel de nuestros bisabuelos, salvo por un detalle. Ellos tenían hambre, pero no le debían nada a nadie.


Que Dios nos inspire. Y disculpad el tono amargo y sombrío de este "post".




- Por cierto, un servidor, Timoteo Bofarull Hautecloque, ya tiene página propia en facebook, buscadme y enlazadme.
- ¿ Que pasa Timoteo, haciéndote publicidad ?.
- "Nene", si no me la hago yo, ¿ quien me la va a hacer ?.
- Amigos, echadle un vistazo a la página de este indeseable, si hasta liga y todo.
- "Nene", es que ser mas guapo que tú no es nada difícil.
- Gracias Timoteo, yo también te quiero.

10 comentarios:

  1. La realidad no es sombría y la memoria es preciso conservarla aunque sirva para saber todo lo que hemos perdido, y que tendremos que recuperar.

    Un abrazo

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  2. Si , ha explicado usted muy bien el tema.
    ¿ Como se reinventa el País? hay esperanza ? Cuales serán los propósitos del gobierno para emplear a tanta gente ?

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    1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    2. Rosa, pues poniéndonos en movimiento y trabajando en lo que sea, aunque nos tengamos que inventar el trabajo, o hacerlo en la economía sumergida y a escondidas.

      Y no esperemos soluciones de los políticos, porque ellos forman parte del problema.

      Si que hay esperanzas, nunca hay que perder el ánimo.

      Saludos.

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  3. Hola! he nominado este blog para los “Premios RoB Dangal TV” … Invitamos a quienes te siguen a que también envíen su voto, para respaldar tu nominación y/o la de otros blogs que merezcan ser galardonados. Estás son las bases para quienes deseen votar: Para participar de la elección sólo debes enviar un mail a rob.dangal.tv@gmail.com con tu voto, pudiendo nominar hasta un máximo de 3 blogs.(puedes votar por mi si o deseas) Tienes tiempo de hacerlo hasta el día 5 de mayo de 2012. No serán computados los votos que se hagan a favor de un blog propio, ni tampoco a favor de blogs que estén inactivos desde el 1 de enero de 2012. Los galardones a entregar serán de acuerdo a la cantidad de votos recibidos por cada uno, a saber: 3º lugar, “Blog de Oro”; 2º lugar, “Blog de Platino”, y para el 1º lugar, “Blog de Diamante”. Suerte!!!!

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  4. Al final nos faltó la picardía de Ulises y nos dejamos arrullar por los cantos de sirena durante demasiado tiempo, sin tomar la precaución de atarnos primero al mástil.

    Besos.

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  5. Olvido, creo que no había un mástil lo bastante fuerte para sujetarnos. Esta vez aprenderemos las lecciones con sangre. Por lo menos, recordaremos lo que ha ido mal.

    Besos.

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  6. Hola Rodericus!!
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    Los galardones a entregar serán de acuerdo a la cantidad de votos recibidos por cada uno, a saber: 3º lugar, “Blog de Oro”; 2º lugar, “Blog de Platino”, y para el 1º lugar, “Blog de Diamante”.
    Una vez más, gracias por participar y suerte para todos los que sean nominados.

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