Han pasado algo más de veinticuatro horas desde que el vuelo 4U 9535 de Germanwings que enlazaba Barcelona con Düsseldorf se estrelló en las estribaciones de la cordillera de los Alpes franceses.
En primer lugar, quiero expresar toda mi solidaridad y mi cariño a los familiares de las victimas del triste accidente, porque resulta muy duro asimilar la perdida de un ser querido en un accidente súbito e inesperado como el que nos ha sacudido.
Durante las horas transcurridas, los medios de comunicación del país se han volcado en la cobertura informativa del hecho, y hay un par de críticas sobre el tratamiento de la información que quiero apuntar.
Los diferentes canales de televisión nos han bombardeado durante horas con imágenes de los familiares de las victimas a su llegada al centro de información improvisado que Aena instaló en el aeropuerto del Prat del Llobregat.
Algunas de estas personas aparecían en las imágenes absolutamente deshechas por el dolor de la perdida de un hijo, un hermano, o un cónyuge. Creo que los medios de comunicación deberían ser mas pudorosos y cuidadosos con el sufrimiento ajeno, y no hacer públicas unas imágenes que darán la vuelta al mundo, y donde alguien aparece completamente abatido y superado por el dolor. Creo que esto no aporta ninguna información de interés, y que estas imágenes atentan contra la dignidad de estas personas que están viviendo una situación personal al limite de sus fuerzas, y muy difícil de gestionar.
Después están las horas de programación especial dedicadas al suceso, dedicadas a exponer lo poco que se conoce del accidente, y a recabar informaciones de expertos en ingeniería aeronáutica, pilotos comerciales, dirigentes del sindicato de pilotos, y en general, a todo bicho viviente que tenga alguna relación, aunque sea lejana con la aviación comercial.
Poco o muy poco pueden aportar estos "especiales informativos" y tertulias. Un accidente aéreo es de por si complejo. No suele haber una causa única en estos casos, sino mas bien un cumulo de ellas.
Fué el caso del accidente del vuelo 5022 de Spanair entre Madrid y Gran Canaria que se estrelló desgraciadamente al despegar el 20 de Agosto del años 2.008.
Una sonda de velocidad averiada, un "arreglo" apresurado, un mal diseño de un cuadro eléctrico, y el nerviosismo de los pilotos por el retraso que les hizo saltarse la lista de comprobaciones se convirtieron en un cóctel mortal.
Pero de todo esto, tardamos meses, años en enterarnos
Hasta que no hayan transcurrido unos días y se hayan podido analizar los restos del aparato y toda la información disponible, saber lo que ha ocurrido con certeza es imposible, y mas en este caso, bastante extraño, por cierto.
Cuando la información no aporta nada nuevo, deja de ser información y pasa a ser ruido.
Otro asunto que me ha sorprendido han sido los comentarios anti-catalanes que a raíz
del accidente se expandieron por las redes sociales.
Es necesario tener una falta total de empatia con el sufrimiento ajeno, ser un psicopata y tener la cabeza hueca como para escribir las canalladas que podéis leer en el enlace que os he dejado. Algunos de ellos, en cuentas perfectamente identificables. Soy catalán, pero por encima de todo, soy un ser humano y la muerte y el sufrimiento de los demás no me son ajenos.
Visto esto, ¿ a alguien le extraña que crezca el sentimiento separatista en Cataluña ?.
Me siento tan catalán como español, pero en ocasiones como estas, también me dan ganas de pedir la independencia y salir pegando un portazo.
Arriba he colgado una preciosa versión del clásico tema de los "Kansas", "Dust in the Wind", interpretado por mis adorados "Eagles".
En días como hoy, me siento así, polvo en el viento, tan solo polvo en el viento.
- Tranquilo, "Nene", tan solo son cuatro descerebrados.
- Si Timoteo, en otro momento no haría ni caso, pero en días como hoy duele. . . .
- ¡¡ Voy a buscar la botella de orujo !!.