Nos vamos de vacaciones.
Timoteo, los "chicos" y un servidor escapamos de este manicomio controlado y dopado que es Barcelona, y buscaremos las brisas del Cantábrico.
Un lugar donde poder descansar. Donde poder reflexionar, leer, escribir y recargar las agotadas baterías ( en mi caso ).
Un lugar donde los "chicos" puedan corretear, saltar, olisquear y hacer lo que hace cualquier perro libre en un bosquecillo o en un campo, sin que yo me preocupe de que sean atropellados por ningún descerebrado con licencia para matar, perdón, quiero decir carnet de conducir vehículos a motor.
Un lugar donde Timoteo pueda pasear a cara descubierta sin temor a que ningún mafioso al que envió a la cárcel, y que algún "comprensivo" juez ha puesto en libertad prematuramente, le dé una paliza, o le suceda algo peor aún. Donde no tenga que mirar a sus espaldas, ni palpar el bulto de la automática del 45.
Un lugar donde se respire aire puro, donde echar una partida al tute con los paisanos, y compartir con ellos un vaso de vino. Y desafinar con ellos cantando a coro viejas canciones casi olvidadas mientras el sol se pone.
Un lugar donde las verdes montañas se precipitan vertiginosamente en el mar, y donde la naturaleza nos da la autentica talla del hombre.
Donde poder cicatrizar heridas. No ha sido este un buen año, ni en lo personal, ni en lo profesional.
Os deseo todo lo mejor para estos días de descanso.
- ¡¡ Cojonudo "nene" !!, voy a preparar las maletas.
- Timoteo, te recuerdo que nos vamos de vacaciones a un pequeño y coqueto pueblo. Con una sola maleta, tienes mas que de sobra. Cuatro camisetas, dos camisas, tres pantalones, un bañador y algunas mudas de ropa interior es mas que suficiente. No hace falta que lleves ningún "smoking", ni el traje de neopreno para practicar el "surf" como el año pasado. Te recuerdo que viajamos en un utilitario con un maletero bastante limitado.
¡¡
- "Timo", la únicas fiestas que me interesan, son las sardinadas populares, y ahí no hace falta ir de etiqueta.